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Boys don't cry

Año 1999
País USA
Estreno 03-03-2000
Género Drama
Duración 119 m.
ZINEMA.COM T. original Boys don't cry
  Dirección Kimberly Peirce
   Intérpretes Hilary Swank (Teena Brandon/Brandon Teena)
   Chloë Sevigny (Lana)
   Peter Sarsgaard (John)
  Brendan Sexton (Tom)
  Alison Folland (Kate)
   Guión Kimberly Peirce
   Andy Bienen
Fotografía Jim Denault
Música Nathan Larson
Montaje Tracy Granger
Lee Percy
Sinopsis
Basada en un hecho real, la película relata la vida de una muchacha llamada Teena Brandon que se disfraza de hombre para conseguir el amor de otra mujer, Lana. Pero cuando se descubra la verdadera identidad de la joven, la intolerancia provocará que se desencadene la tragedia.
    
Referencias
  • Es la primera película que dirige la norteamericana Kimberly Pierce.
     
  • Está protagonizada por Hilary Swank (que interpretó a Carly Molloy en algunos capítulos de la serie de televisión Sensación de vivir) y que ha conseguido el Globo de Oro a la mejor actriz dramática. También fue premiada en el Festival Internacional de Cine de Gijón 1999 y es candidata al Oscar de este año.
     
  • También intervienen Cloë Sevigny, candidata al Oscar a la mejor actriz secundaria a la que se ha podido ver en Kids o Mi mapa del mundo y que próximamente intervendrá en The last days of disco y American psycho; Peter Sarsgaard (El hombre de la mascara de hierro, Dead man waking) y Brendan Sexton (Bienvenidos a la casa de muñecas, Pecker).
     
  • Se presentó fuera de concurso en el Festival de Cine de Venecia 1999.
Crítica
La primeras películas de un director acostumbran a ser un declaración de principios y, en muchas ocasiones, la pasión con la que están realizadas no permite vislumbrar lo que puede llegar a ser su posterior trayectoria cinematográfica. En el caso de la norteamericana Kimberly Pierce, la película Boy's don't cry con la que arranca su filmografía apenas permite definir los fundamentos de su obra. Hay que tener en cuenta que se basa en un suceso real y en los últimos años la televisión parece querer monopolizar la traslación a la pantalla de sucesos reales, lo que puede hacer con mayor eficacia debido a la rapidez y poca meticulosidad con la que se trabaja en este medio. Por otro lado, se trata de un largometraje de denuncia social extremadamente próximo al contenido de muchos telefilmes. Cabe preguntarse si la razón por la que la película no es un telefilme radica en que se narra la historia de una relación lésbica y este tema, aunque resulté sorprendente, aún es considerado tabú en las televisores norteamericanas y en buena parte del mercado al que, por extensión, se dirigen estos productos.

La película gira en torno a Teena Brandon, una mujer que se hace pasar por hombre en un entorno hostil y conservador que llega a resultar claustrofóbico. A pesar de que se fuerza en exceso algunas de las inevitables situaciones comprometidas en las que obviamente se ve inmerso el personaje, hay que destacar la gran labor desarrollada por su protagonista, Hillary Swank, y la creíble caracterización que consigue al tratar de parecer un hombre. Es una lástima que la película se limite a ser una simple crónica detallada de los sucesos que acontecieron y no profundice sinceramente en la personalidad de sus protagonistas. Sólo lo consigue en algún momento con el personaje de Lana, la mujer que cree estar enamorada de un hombre y que reafirmará sus sentimientos al enterarse que se trata realmente de una mujer. El personaje está interpretado por Clöe Sevigny, una actriz cuya carrera promete ser bastante interesante.

La violencia que impregna las escenas finales de la película, además de gratuita resulta un recurso demasiado fácil para tratar de conseguir un posicionamento favorable por el personaje y por la injusta discriminación social que le ha conducido a ello. Tratar de reivindicar la liberación sexual recurriendo a provocar un sentimiento de lastima en el espectador por la pobre chica agredida es, cuando menos, poco afortunado. Es esa la razón por la que el conjunto resulta bastante poco acertado a pesar de la esmerada actuación de sus protagonistas.

N.A.